Anteriormente, François Hollande se había visto obligado a no presentarse a un segundo mandato tras el libro (muy) abierto «El presidente no debería decir eso». Evidencia de que los escritos conservan un impacto real. Por cierto, fue mucho mejor.
Hoy, Francia tiembla hasta los cimientos, las manifestaciones se multiplican, el índice de popularidad de Emmanuel Macron es tan bajo como la posibilidad de ver a Bélgica triunfar en Eurovisión y… El ministro de Economía, Bruno Le Maire, es arrancado de una novela. Con algunos clips emocionantes que deberían haberse anunciado. Desafortunadamente, no es el mejor vendedor buscado. Su «Fuga americana» solo ha vendido 3.500 copias.
Los políticos que publican libros no son nada nuevo. Espere verlos prosperar en el próximo año electoral. Programas políticos disfrazados en los que muchas veces no escribieron la más mínima línea. Cuando eres un ministro en funciones, lo mejor es abstenerse de ceder a tus deseos en el Grand Prix Goncourt. Este es un estigma en un contexto social donde la gente espera algo más que Alejandría o amoríos de su imaginación.
Espera a terminar tu post para dejar tus memorias (además, las memorias de Nicolas Sarkozy son interesantes, y son un auténtico éxito en las librerías) o para saciar tu maldito síndrome de escritor.