Las piedras del hambre se han utilizado como testimonio de las sequías que asolaron Europa a lo largo de la historia. Ellos dan testimonio del sufrimiento que vivieron, las malas cosechas y las hambrunas que asolaron a la población durante estos eventos desastrosos.
Este tipo de parámetro hidrológico se encuentra especialmente en el Elba, el río que cruza la República Checa y Alemania.
Una de estas «piedras del hambre» reapareció hace bastantes días en la ciudad checa de Děčín, señal de la fuerte sequía que vive Europa en estos momentos.
En este último, hay una inscripción de 1616 que menciona las tragedias ocurridas durante este período: «Si me ves, llora». También se indican otras fechas: “Antes de 1900, se celebraron las siguientes sequías de piedra: 1417, 1616, 1707, 1746, 1790, 1800, 1811, 1830, 1842, 1868, 1892 y 1893”, identifica un estudio de 2013 realizado por investigadores checos.
La última vez que apareció esta piedra fue recién en 2018.
El Observatorio Europeo de la Sequía informa que el 47% de Europa está experimentando actualmente condiciones de sequía. Con el calentamiento global, estos desastres naturales pueden multiplicarse.