Isabel Díaz Ayuso esperaba que Pedro Sánchez desapareciera de su camino y que comenzara una nueva etapa de paz y concordia entre el Gobierno de España y la Comunidad de Madrid. Sin embargo, el escenario electoral dejó un panorama incierto, con Alberto Núñez Feijóo como el candidato más votado pero con un período de negociaciones abierto y más opciones de gobernar para Sánchez.

A pesar de las desilusionantes cifras de Feijóo y del Partido Popular en Madrid, Ayuso salió al balcón de Génova junto con el candidato y fue aclamada por el público presente. Los resultados del Partido Popular en Madrid no cumplieron las expectativas, obteniendo solo 15 de los 37 escaños en juego y un 40,4% de los votos.

Ayuso había anticipado una nueva etapa de cooperación con el Gobierno central, pero en la última semana cambió de tono advirtiendo de un resultado más ajustado de lo esperado. El Partido Socialista (PSOE) revitalizó su presencia en la región, obteniendo casi un millón de votos y 11 escaños, superando a Vox pero sin alcanzar los resultados de Más Madrid y Podemos en las elecciones de mayo.

El mapa electoral de la región se tiñó de azul con el Partido Popular como el más votado en la mayoría de los municipios, incluyendo algunos tradicionalmente de tendencia izquierdista. Durante la jornada electoral, hubo sospechas de los populares respecto al corte en los trenes entre Valencia y Madrid, sugiriendo que esto afectaba a los votantes que regresaban a la capital.

A pesar de este incidente, la participación en la comunidad superó el 74,1%, siendo más alta que en las últimas elecciones. Los resultados electorales dan impulso al PSOE en la región y generan incertidumbre sobre la formación del gobierno en la Comunidad de Madrid.