Las autoridades en el norte de México han destruido 14 vehículos blindados caseros utilizados por los cárteles de la droga para librar guerras terrestres.
Los vehículos generalmente se modifican a partir de camiones comerciales, con armadura de placa de acero soldado. Llamados «monstruos» o «monstruos» en México, algunos de los vehículos destrozados son verdaderamente aterradores.
Muchos soldaron un pro de apisonamiento de acero grueso al frente. Otros tenían puertos de tiro y torretas de armas. Al menos uno estaba pintado de camuflaje verde para parecerse a un vehículo militar mexicano.
Video distribuido por la Procuraduría General de la República muestra a una grúa arañando un vehículo en el estado de Tamaulipas.
El estado, que limita con Texas, es el hogar de dos cárteles de la droga en guerra, el del Noreste y el del Golfo.
Los fiscales no dijeron a qué pandilla pertenecían los vehículos ni cuándo fueron incautados.
Aunque estos vehículos pueden parecer intimidantes, han demostrado ser vulnerables en la práctica.
Debido a que la armadura de acero agrega mucho peso, son lentas, difíciles de manejar y, a menudo, se rompen. Fáciles de detectar, también parecen vulnerables a artefactos incendiarios o explosivos. Muchos se ven quemados.
Su uso ilustra hasta dónde han llegado los cárteles mexicanos para luchar contra sus rivales y autoridades. Las armas de los cárteles incluyen artefactos explosivos improvisados y drones que lanzan bombas.