Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de inflación en marzo se situó en un 3,3 % interanual, lo que representa una baja de dos décimas con respecto al mes anterior. Esta cifra incluye la inflación subyacente, que excluye los precios de la energía y alimentos no elaborados, y también se mantuvo en el 3,3 %, marcando su nivel más bajo desde febrero de 2022.
El aumento de la tasa general se atribuye principalmente al incremento en el precio de la electricidad, con el IVA del recibo de la luz pasando del 10 % al 21 % en marzo. El grupo de la vivienda, que incluye la electricidad, registró un aumento del 1,5 % interanual, mientras que el ocio y la cultura también aumentaron un punto, principalmente por el encarecimiento de los paquetes turísticos.
Además, el grupo del transporte también experimentó un aumento en su variación medio punto, debido al incremento en los precios de carburantes y lubricantes. Por otro lado, el aceite de oliva fue el producto que más se encareció, siendo un 70 % más caro que hace un año, seguido por los zumos de frutas y las patatas.
En marzo, los precios de consumo aumentaron un 0,8 % en comparación con febrero, siendo la vivienda y el ocio y la cultura los grupos con mayor impacto positivo. Siete comunidades autónomas registraron una inflación superior a la media nacional en marzo, mientras que La Rioja y Cantabria reportaron las tasas más bajas.
El Ministerio de Economía atribuye este ligero incremento en la inflación de marzo a la normalización del tipo impositivo para la electricidad, resaltando la mejora del poder adquisitivo de las familias y la competitividad de las empresas españolas.
