Greta Fiedler, de 23 años, fue asesinada un mes después de llamar psicópata a Putin, diciendo que su deseo de unir a Rusia podría terminar muy mal. Eso fue hace más de un año, pero sus palabras ahora están adquiriendo una dimensión completamente nueva.
En enero de 2021, dijo: «Putin sufrió muchas humillaciones cuando era niño. Con razón abandonó la ley para unirse a la KGB. Desde niño fue tímido y temeroso, temeroso de la oscuridad, el ruido y los extraños. En mi opinión, es debe ser una morbilidad de origen psicológico o sociopático muy temprana.”
Un asesinato horrible
Su exnovio, Dmitry Korovin, admitió que mató a Greta tras una disputa económica, sin tener que ver con los fuertes comentarios de la joven sobre el líder ruso.
Il a expliqué aux enquêteurs qu’il avait dormi avec le cadavre de la jeune femme pendant trois jours dans une chambre d’hôtel, avant de la place dans une valise et de l’abandonner dans’ le coffre’d plus year. Gracias a un amigo que alertó a las autoridades sobre la desaparición de la joven, los investigadores terminaron por encontrar su cuerpo. Así Korovin se vio obligado a confesar.