La multinacional de alquiler de oficinas y espacios de coworking, WeWork, ha presentado una solicitud de protección bajo el Capítulo 11 del Código de Quiebras de Estados Unidos. La empresa, que acumula una deuda de 18.656 millones de dólares y posee activos por un valor de 15.063 millones de dólares, ha tomado esta decisión debido a su difícil situación financiera.

Como resultado de esta situación, las acciones de WeWork han sido suspendidas en la Bolsa de Nueva York. Sin embargo, la compañía ha anunciado que llevará a cabo una reorganización integral con el objetivo de fortalecer su estructura de capital y mejorar su situación financiera.

En este sentido, WeWork ha alcanzado un acuerdo de apoyo a la reestructuración con acreedores que representan el 92% de sus bonos garantizados. Durante este proceso, la empresa se centrará en asegurar la continuidad de su negocio y en brindar servicios a sus miembros.

Es importante mencionar que esta solicitud de protección bajo el Capítulo 11 no afectará a las ubicaciones de WeWork fuera de Estados Unidos y Canadá, ni a los franquiciados de la compañía en todo el mundo. Sin embargo, Adam Neumann, cofundador de WeWork, ha manifestado su decepción ante esta declaración de quiebra.

La situación de WeWork es preocupante, ya que sus acciones han experimentado una depreciación del 99% durante este año. Además, en el segundo trimestre del presente año, la empresa registró pérdidas por un total de 349 millones de dólares.

Existen dudas sustanciales sobre la capacidad de WeWork para continuar como un negocio en marcha debido a las pérdidas que ha sufrido y a las necesidades de efectivo proyectadas. Sin embargo, la compañía espera que la reorganización integral que llevará a cabo le permita superar esta situación desafiante y seguir brindando sus servicios de alquiler de oficinas y espacios de coworking exitosamente.