Las autoridades sanitarias de Cataluña han implementado un cambio significativo en la detección del cáncer de cuello uterino, especialmente para las mujeres de entre 30 y 65 años. A partir de ahora, en lugar de hacerse la citología cada cinco años, la prueba principal para detectar este tipo de cáncer será la del virus del papiloma humano (VPH).

Esta nueva prueba se podrá realizar tanto en el centro de salud en Barcelona y Lleida, como en la comodidad del hogar con un kit de automuestra. El VPH es responsable del 99% de los casos de cáncer de cuello uterino, por lo que su detección temprana es clave para reducir la incidencia de esta enfermedad.

Se estima que la prueba del VPH podría reducir entre el 60% y el 70% la incidencia de cáncer de cuello uterino. A partir del año 2025, el sistema de salud contactará de forma proactiva a las mujeres para invitarlas a realizarse esta prueba.

La estrategia de reducción del cáncer de cuello uterino incluye también la vacunación, el cribado con pruebas de VPH y el tratamiento para las pacientes. Se espera que este tipo de cáncer deje de ser un problema de salud pública cuando la incidencia sea de cuatro casos por cada 100,000 habitantes.

Con este cambio en el protocolo de detección, se busca prevenir y detectar a tiempo el cáncer de cuello uterino, mejorando así la calidad de vida de las mujeres catalanas. Una medida que sin duda contribuirá a la lucha contra esta enfermedad y a la promoción de la salud en la región.