El rublo, el peso argentino y la lira turca se encuentran entre las monedas más devaluadas del mundo, según informes. El 14 de agosto, el rublo superó la barrera de los 100 rublos por dólar, lo que llevó al Banco Central de Rusia a convocar una reunión extraordinaria para elevar los tipos de interés.

Desde que los tipos de interés se aumentaron en julio, el rublo ha perdido alrededor del 8% de su valor. En lo que va de año, la moneda rusa se ha depreciado un 27% debido al tope impuesto en el precio del petróleo ruso. Esta ha sido la séptima caída consecutiva del rublo en los últimos siete meses.

Los expertos predicen que el Banco Central aumentará los tipos de interés en un punto porcentual. El desequilibrio en la balanza comercial es considerado el principal factor de la caída del rublo. Además, las sanciones occidentales han reducido los ingresos por exportación de hidrocarburos, disminuyendo los ingresos del Estado ruso en un 50%.

Otros factores que han contribuido a la depreciación del rublo incluyen la reducción de la extracción de petróleo, la especulación bursátil y la fuga de capital de las empresas extranjeras. Además, el incremento del gasto en defensa también ha influido en la depreciación de la moneda rusa.

La situación bélica y política también ha sido un factor determinante en la depreciación del rublo. Se espera que el Banco Central tome medidas para abordar la situación y estabilizar la moneda en las próximas semanas.

En resumen, el rublo se ha convertido en una de las monedas más devaluadas del mundo debido a una combinación de factores económicos y políticos. El Banco Central de Rusia está trabajando para frenar la caída de la moneda y restaurar la confianza en el rublo.