El invitado de «En aparté» Xavier Dolan habló apasionadamente sobre su relación con Gaspard Ulliel, quien lo dirigió en Juste la fin du monde, y el motivo de su ausencia en el funeral del actor.
Mientras los familiares y el mundo del cine acudían a rendir un último homenaje a Gaspart Ulliel el pasado 27 de enero en París, la ausencia del director y amigo Xavier Dolan se notaba sin saber explicación alguna. Ausencia justificada por el director afectado en aparte.
«Quería asistir al funeral. Pero no sé. Fue muy lejos, luego se hizo público. Había mucha gente. Tenía un poco de miedo al Covid y…», explica Xavier Dolan, visiblemente emocionado. Todavía traumatizado por la prematura muerte del actor en un accidente de esquí, el director pretende rendirle homenaje durante la noche del viernes en la César Gala de Canal+, donde fue nominado en la categoría de Mejor Papel Secundario por Xavier’s Lost Illusions. Janelli.
«Hubiera asistido, supongo, incluso si no hubiera sido nominado. Muy rápidamente, después de su muerte, comencé a pensar en eso», comenzó. Antes de volver a emocionarse al hablar de su amistad. «Esa luz que dio, que soltó. Era una persona… Era una persona (…) No sé si podría hablar de eso… Todavía tenía demasiadas dificultades para darme cuenta y aceptar», continúa.
«Sueño mucho con él. (…) Sueño con él constantemente, sueños que a veces son muy crueles. Son esos sueños muy realistas en los que crees que realmente estás en la realidad, así que despertar es aún más salvaje porque realmente creer en él. (…) Era alguien que amaba. Le gustaba pensar. Muchas veces levantaba la vista antes de hablar, como si mirara un poco al cielo. Todo lo que salía de su boca era un ataque, un peso, una medida, y un cultivador. Era un erudito curioso. Hablaba bien y luego hablaba cuando tenía que hablar”, añade Xavier Dolan.