primario
- En 2018, 3500 mujeres francesas murieron de cáncer de ovario y se informaron 5200 nuevos casos.
- “La gran mayoría de los pacientes son diagnosticados con un estadio avanzado de cáncer”, lamenta el INCa.
Según una nueva encuesta realizada por la British Charitable Association Diana para el cáncer de ovarioLas mujeres todavía saben muy poco acerca de los síntomas del cáncer de ovario.
«Estas cifras son increíblemente decepcionantes».
El 79% de las 1.000 mujeres inglesas encuestadas no sabía que la distensión abdominal podía ser una manifestación de la enfermedad. El 78 % pensaba que lo mismo ocurría con el dolor abdominal y el 97 % no era consciente de la necesidad de alertar sobre la rápida aparición de la saciedad. Otra cifra preocupante: el 40% de los encuestados también tiene la idea errónea de que el cáncer de ovario puede detectarse mediante la detección del cáncer de cuello uterino.
«Estas cifras son increíblemente decepcionantes. Sabemos que hemos marcado la diferencia en los últimos 10 años gracias a la dedicación de miles de activistas, pero no es suficiente».Anwyn Jones, CEO de Target Ovarian Cancer, se arrepiente. «Es imperativo que todos conozcan los síntomas. Necesitamos hacer una campaña amplia sobre este tema, con el apoyo del gobierno. Si tenemos éxito, menos personas serán diagnosticadas más tarde, menos mujeres necesitarán tratamiento quirúrgico y, en última instancia, menos pacientes morirán innecesariamente». del cáncer de ovario.”ella agrega.
Síntomas que deben llevar a la consejería
Reconocer los síntomas del cáncer de ovario puede ser difícil, especialmente en una etapa temprana. A menudo son idénticos a condiciones menos graves, como el síndrome del intestino irritable (SII) o el síndrome premenstrual (SPM). Esto es lo que debería llevar a su médico a considerar la posibilidad de cáncer de ovario:
Sensación constante de hinchazón.
hinchazón del estómago
Molestias en el estómago o la zona pélvica.
Sensación de saciedad rápidamente al comer o pérdida del apetito.
La necesidad de orinar con más frecuencia o urgencia de lo habitual.
Indigestión persistente o náuseas.
Dolor durante el coito.
Cambio en los hábitos intestinales.
dolor de espalda
Sangrado vaginal, especialmente después de la menopausia.
Sensación constante de cansancio.
Pérdida de peso involuntaria.
Ciertos factores se consideran protectores contra la enfermedad, como la anticoncepción oral, el embarazo, la ligadura de trompas o la escisión. Por el contrario, algunos elementos aumentan el riesgo de cáncer de ovario y deben conducir a la vigilancia: antecedentes personales y familiares, falta de los mismos, sobrepeso u obesidad, períodos precoces, menopausia tardía y ‘vejez’.