Publicado el 1 de abril de 2022 a las 12:40
Un número ‘demasiado alto’ e ‘inaceptable’. Más de dos años después de la aparición del Covid, casi 6 millones de personas han muerto a causa del virus, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, que determina que este dato ciertamente está subestimado.
En la versión revisada de su plan estratégico para combatir la epidemia, la Organización Mundial de la Salud describe la epidemia, que «sigue siendo una emergencia global aguda». El objetivo ahora es «acabar con la emergencia sanitaria de la Covid-19 en 2022», mientras el mundo sigue luchando contra la variante Omicron. Con esto en mente, Naciones Unidas prevé tres escenarios para el desarrollo de la epidemia.
Mejor inmunidad y reducción de infecciones graves.
“Según lo que sabemos ahora, el escenario más probable es que el virus siga evolucionando, pero la gravedad de la enfermedad que provoca disminuirá a medida que el virus siga evolucionando. La inmunidad aumenta gracias a la vacunación y las infecciones”, explicó. Gerente General Tedros Adhanom Ghebreyesus durante una rueda de prensa.
Pueden ocurrir picos periódicos si la inmunidad disminuye y puede ser necesario reforzar la vacuna, al menos para las poblaciones prioritarias, advierte la OMS.
¿Una alternativa más virulenta o el fin de las vacunas?
No obstante, el documento publicado por la Organización Mundial de la Salud prevé la llegada de una variante más virulenta y más transmisible. En este escenario, de lo más pesimista, esta nueva mutación del virus será más resistente a las vacunas. Esta situación requerirá cambios «significativos» en las vacunas existentes, que habrá que volver a administrar a las personas más vulnerables.
Pero cuidado: incluso en su forma actual, aparentemente menos grave, «el virus todavía tiene mucha energía», advierte Maria Van Kerkhove, quien supervisa la lucha contra el covid para la Organización Mundial de la Salud. La semana pasada, más de 10 millones de personas se contagiaron y 45 mil fallecieron, según cifras de la organización.
Mejorar la detección de la enfermedad de Covid a largo plazo
La Organización Mundial de la Salud también ha revelado sus pautas para poner fin al brote. Por lo tanto, las autoridades deberían continuar monitoreando e incluso impulsar los indicadores del desarrollo del virus, aunque muchos países están reduciendo la escala de las campañas de prueba. Este último también tendrá que continuar la secuencia para descubrir la posible aparición de nuevas variantes. La organización también pide una mejor detección de «Largo Covid» para reducir los efectos a largo plazo del virus y monitorear la cantidad de animales que pueden ser un reservorio de un nuevo virus.
El final de la epidemia también verá la mejora de las estructuras de investigación y salud. Pero además, la Organización Mundial de la Salud lo ha estado escrutando durante mucho tiempo, a través de la vacunación. Las vacunas ciertamente han perdido su efectividad debido a la llegada de variantes, pero aún protegen bien contra formas peligrosas del virus, recuerda la organización. Ya se habían administrado once millones de dosis a fines de marzo de 2022, pero aún faltaba vacunar alrededor del 36% de la población mundial. La Organización Mundial de la Salud mantiene su objetivo: vacunar al 70% de la población mundial para el próximo verano.