El fundador de World Central Kitchen, José Andrés, acusa al Gobierno israelí de un ataque aéreo directo contra su convoy en Gaza. El presidente Isaac Herzog expresa sus disculpas por la muerte de siete voluntarios de la ONG.
La ayuda humanitaria proveniente del mar con apoyo internacional fue coordinada con el Ejército israelí, pero tras el ataque, José Andrés exige una investigación desde arriba. La suspensión de operaciones en Gaza ha sido una medida tomada por el chef en respuesta a la tragedia.
A nivel internacional, han surgido condenas por la muerte de los trabajadores de WCK en Gaza. Estados Unidos, aliado de Israel, solicita una investigación inmediata y protección para los trabajadores humanitarios. Por su parte, el Ejército israelí asegura una investigación independiente y niega cualquier intención de dañar a los miembros de WCK.
Israel veía a World Central Kitchen como un socio necesario en la reconstrucción post-guerra en Gaza. A pesar de los elogios a la organización, dirigentes israelíes critican a la UNRWA, acusándola de complicidad con Hamas. Sin embargo, UNRWA niega estas acusaciones y pide protección para los trabajadores humanitarios en Gaza.
La polémica en torno a la tragedia en Gaza sigue en aumento, con calls de justicia y protección para los voluntarios que arriesgan sus vidas en medio de conflictos internacionales. El mundo espera respuestas claras por parte de las autoridades correspondientes.
